Un artículo de Gonzalo Ballesteros y Antonio M. Arenas
En un monólogo de Joaquín Reyes, el chanante se preguntaba por qué cuando alguien ofrecía un chicle la respuesta inmediata era: “¿qué si tengo o qué si quiero?”. Con los Oscar ocurre algo parecido, cuando preguntan sobre el ganador de alguna categoría se suele responder con otra pregunta: “¿quién creo o quién quiero?”. La Academia de Cine de Hollywood y su sistema de votación consiguen que muchas veces los premios sean previsibles, y aunque también hay ciertas sorpresas, en general divergen los premios otorgados con el criterio del crítico o del cinéfilo medio. No hace falta recordar que Ciudadano Kane (Orson Welles, 1941), Taxi Driver (Martin Scorsese, 1976) o Pulp Fiction (Quentin Tarantino, 1994) forman parte de una extensa lista de obras maestras a las que no se les reconoció con el premio a mejor película en su año.
Ahondando en esta idea, en Revista Magnolia queremos hacer nuestro particular dossier de los Oscar. Al igual que Tom Hansen debe enfrentar sus expectativas contra la realidad cuando acude a la fiesta de su ex-novia Summer en 500 días juntos (500 Days of Summer, Marc Webb, 2009), nosotros vamos a enfrentar a los candidatos en las principales categorías para analizar quien creemos va a ganar según las casas de apuestas y quien querríamos que ganara.
· Brave (Mark Andrews, Brenda Chapman, Steve Purcell)
· ¡Piratas! (Peter Lord, Jeff Newitt)
· El alucinante mundo de Norman (Chris Butler, Sam Fell)
· ¡Rompe Ralph! (Rich Moore)
· Frankenweenie (Tim Burton)
Tres películas de animación stop-motion contra los dos últimos films de Disney y Pixar, que vuelven a superarse en el campo de la animación digital. Entre artesanía y tecnología la decisión parece estar tomada, pero que esta tampoco nos impida disfrutar del gran nivel del cine de animación de este año, no se encuentra solo en dos películas.
¡Piratas!
Tras el desgraciado incendio acontecido en los almacenes de la compañía Aardman en Bristol, la mítica productora, creadora de los entrañables Wallace & Gromit, tuvo que buscar un aliado como Sony para sacar adelante su último gran proyecto. Maestros de la animación stop-motion con plastilina, lo son también recuperando el espíritu del cine de aventuras con un sentido del humor que para nada se reduce a un argumento infantil, ni tampoco al (involuntariamente genial) doblaje de Andrés Iniesta, sino que es capaz de articular a la propia reina Victoria de Inglaterra y su gobierno como los enemiga de la función. Una brillante vuelta de tuerca a la historia y la piratería con la que lanzan un mensaje por bandera que les identifica. Más vale ser auténtico y fiel a tus principios que triunfador a costa de perderlos. Por eso lo que pase el domingo no importa, ¡Piratas! ya ha ganado.
Brave
El Globo de Oro a mejor film de animación fue para Brave, lo que prácticamente la convierte en la favorita de los Oscar. Su esplendor técnico, al servicio de un guión embarullado e infantil, parece hacer olvidar que es fruto de una lucha interna en el estudio, ya que la película fue usurpada de su creadora por diferencias creativas, probablemente la razón de que el resultado final está lejos de los mejores films de Pixar. Pero por encima de todo la decisión es cuestionable dado que no es la película que debió haber sido originalmente de finalizarla su autora, Brenda Chapman. Mientras tanto, las casas de apuestas se decantan con escasa diferencia por ¡Rompe Ralph!. Lo que parece claro es que, como casi siempre acaba pasando, el Oscar se quedará en la casa Disney. No habrá piratas, fantasmas, ni perros que vuelvan a la vida que esta vez los detengan.
· No (Pablo Larraín, Chile)
· Amour (Michael Haneke, Austria)
· A Royal Affair (Nikolaj Arcel, Dinamarca)
· Rebelle. War Witch (Kim Nguyen, Canada)
· Kon-Tiki (Joachim Ronning y Espen Sandberg, Noruega)
El apartado de mejor película de habla no inglesa suele ser uno de los más interesantes de los premios de la Academia, debido a la dificultad para acceder a una candidatura y por la proyección internacional que adquieren las nominadas. Este año las cinco candidaturas de Amour, incluida mejor película, hacen presagiar que no tendrá problemas para llevarse la estatuilla en esta categoría. Aunque Blancanieves, la elegida por la Academia de Cine de España, no llegó a estar entre las nominadas hay presencia hispana gracias a No, la película de Pablo Larraín que ya obtuvo un reconocimiento en el Festival de Cannes.
Amour
Amour
Expectativas y realidad tienen muchas posibilidades de ir de la mano en esta ocasión. Como hemos comentado antes la película de Michael Haneke es la clara favorita para llevarse el Oscar a mejor película de habla no inglesa, ganó esta misma categoría en los Globos de Oro, se llevó la Palma de Oro en el Festival de Cannes y arrasó en los Premios de Cine Europeo. Pero más allá de los premios y los reconocimientos, Amour se erige como una película hermosa y devastadora a la que poco se le puede rebatir debido a su contundencia cinematográfica y vital.
· Chris Terrio por Argo
· Lucy Alibar, Benh Zeitlin por Bestias del sur salvaje
· David Magee por La vida de Pi
· Tony Kushner por Lincoln
· David O. Russell por El lado bueno de las cosas
Es uno de los premios más reñidos, aunque a primera vista Lincoln destaca como favorita, es posible que cualquiera de las otras nominadas reciba el Oscar. Las cinco están nominadas también al premio de mejor película, por lo que puede ocurrir que la ganadora haga doblete -como mínimo- o que las premiadas sean diferentes para compensar con el premio al guión una suerte peor en el premio principal. David O. Russell y Benh Zeitlin, este último en compañía, son los únicos directores que además adaptan el guión.
El lado bueno de las cosas
Narrada con un dramatismo que genera comicidad, como poniendo humor cuando tendría que ser todo un drama, la adaptación de la novela de Matthew Quick (The Silver Linings Playbook) es capaz de sorprender al espectador y darle la vuelta a las convenciones de la comedia romántica. Integra con naturalidad conversaciones sobre literatura, fútbol americano, relaciones de pareja, apuestas deportivas e incluso bailes de salón en la trama, un extraño y disparatado todo al que David O. Russell es capaz de dar sentido. Pero en el fondo, quizás lo que haga tan especial el guión de El lado bueno de las cosas sea que es una historia sobre perdedores con la que no resulta difícil identificarse. Por ello su Oscar está condenado a ser una expectativa que no llegue a hacerse realidad. Y tampoco pasará nada, que les quiten lo bailao.
Lincoln
Casi una década estuvo Spielberg a vueltas con el proyecto de la película sobre Lincoln, en ese periodo le dio tiempo a cambiar varias veces de guión hasta que encontrara el perfecto, hasta que convenciera a Daniel Day-Lewis. Finalmente fue el libro Time of rivals: The Political Genius of Abraham Lincoln de la historiadora Doris Kearns Goodwin el que convencería a Day-Lewis y al propio Spielberg, compró los derechos del libro y encargó a Tony Kushner la adaptación. El libro abarca toda la carrera del presidente pero Spielberg y Kushner se centraron en su etapa final, cuando decidió librar la batalla por la abolición de la esclavitud, el final de la guerra y su ocaso político y vital. El resultado es un brillante guión: un thriller de despachos, política entre bambalinas y discursos en off.
· Michael Haneke por Amour
· Quentin Tarantino por Django Desencadenado
· John Gatins por El vuelo
· Roman Coppola y Wes Anderson por Moonrise Kingdom
· Mark Boal por La noche más oscura (Zero Dark Thirty)
El vuelo y Moonrise Kingdom son las dos únicas nominadas que no lo están en la categoría de mejor película. En el caso del film de Wes Anderson, es la única nominación a los Oscar. Los otros nominados son los directores Michael Haneke y Quentin Tarantino, este último favorito, y el guionista Mark Boal que escribe el guión original de la película de Kathryn Bigelow y que tampoco sería descabellado que se llevara la estatuilla.
Moonrise Kingdom
La nominación al libreto de Wes Anderson y Roman Coppola hace parecer que Moonrise Kingdom suena a los académicos a extraterrestre, como que no saben donde meterla y la incluyen en guión original creyendo que han cumplido su parte extravagante. Pero no le hacen justicia del todo. El guión relata con preciosismo las consecuencias del amor en un campamento infantil, evocando la inocencia que perdieron los adultos. Wes Anderson conjuga en su obra diálogos estupendos con el placer narrativo de quien quiere a sus personajes y espera que, pese a todos los problemas de sus vidas, al final les vaya bien. ¿Y a él?
Django Desencadenado
Alejado del galardón a mejor director, el que en definitiva debería ser su lugar natural, ya que si los guiones se escriben pensando en imágenes los suyos lo hacen especialmente, Tarantino formula su primer western con maestría. No sólo se dedica a recoger referencias y dejarlas plagadas con estilo, sino que construye una fantasía sobre la esclavitud en el lejano oeste que esconde más complejidad y saber hacer jugando con el espectador de la que parece. Por no hablar de sus diálogos, que son como pepitas de oro. O al menos doradas, como la estatuilla que merecidamente recogerá la noche del domingo.
· Sally Field por Lincoln
· Anne Hathaway por Los miserables
· Jackie Weaver por El lado bueno de las cosas
· Helen Hunt por Las sesiones
· Amy Adams por The Master
Tres veteranas, Field, Weaver y Hunt, y dos jóvenes, Hathaway y Adams, se disputan el premio a mejor actriz secundaria. Hathaway y Hunt coinciden a la cabeza de varias quinielas y tienen roles más autónomos en sus películas, el resto de nominadas interpretan a mujeres en la sombra lo que les puede restar algo de posibilidades.
Amy Adams
En un film sostenido por el duelo entre dos hombres como The Master, dos mentes que se necesitan la una a la otra, sorprende la presencia de un personaje femenino más importante de lo que en apariencia promete. Amy Adams se destapa como una actriz de carácter y silencios en su papel de esposa de Lancaster Dodd, capaz de alzar la voz y desvelar un matriarcado que impone todavía más.
Anne Hathaway
Ya saben el dicho, sino que le pregunten a Charlize Theron, con un mal corte de pelo y un poco de maquillaje ya tienes ganado medio Oscar. Si encima das el cante, lo tienes del todo. Anne Hathaway esta vez no tendrá que tener un sueño para llevarse la estatuilla, pero esperemos alguien ponga un poco de sentido del humor y cuando se la entreguen resulte tenga la forma física de James Franco.
· Christoph Waltz por Django Desencadenado
· Philip Seymour Hoffman por The Master
· Robert De Niro por El lado bueno de las cosas
· Alan Arkin por Argo
· Tommy Lee Jones por Lincoln
Christoph Waltz y Philip Seymour Hoffman bien podrían haber sido nominados a mejores actores protagonistas y nadie se hubiera extrañado, ambos llevan a sus hombros gran parte del peso de sus respectivas películas. El reciente éxito de Waltz en esta categoría y el papel que encarna Hoffman, incómodo para el público americano, pueden alejarles de la estatuilla. Menos influencia han tenido Alan Arkin y Robert De Niro pero tienen en común que sus papeles son bastante amables y entrañables lo que les ha hecho merecedores de la nominación. Por último Tommy Lee Jones, el favorito según las casas de apuestas, ha tenido que encarnar a un izquierdista en Lincoln, algo muy duro psicológicamente deben pensar en Hollywood.
Christoph Waltz
Aunque muchos han visto en el Dr. King Schultz a un Hans Landa en el oeste, lo cierto es que no guardan tantas similitudes los dos personajes de Christoph Waltz. Mientras que en Malditos Bastardos es Waltz quien se adapta a la perfección al entrañable nazi, en Django Desencadenado el papel del cazarrecompensas alemán está escrito por Tarantino a medida de Christoph Waltz. Y eso se nota. En el spaguetti-western de Tarantino el escudero de Django se hace con las riendas de la narración y lejos de pasar a un segundo plano, es la película la que pierde cuando él la abandona. Si Christoph Waltz vuelve a ganar el Oscar, Quentin Tarantino se verá obligado a escribirle un papel en cada una de sus películas y en ese momento ganaremos todos.
Tommy Lee Jones
Más allá de los comentarios sobre su peluca en Lincoln, Tommy Lee Jones aspira a su segundo Oscar que coincidiría con el treinta aniversario de su carrera delante de las cámaras. Puede que el peso de su figura como actor y que Christoph Waltz, su gran rival, ya fue premiado hace tres años en esta categoría, sean suficientes razones para merecer el voto de los académicos y decantar la balanza a su favor. En cuanto a su papel en Lincoln encarna a un congresista republicano de izquierdas que debe moderar su discurso, cuando no silenciarlo, para que sus avanzadas y radicales ideas no perjudiquen la aprobación de la décimo tercera enmienda; con lo que le ha costado siempre a la izquierda moderar su lenguaje…
· Jessica Chastain por La noche más oscura (Zero Dark Thirty)
· Quvezhané Wallis por Bestias del sur salvaje
· Emmanuelle Riva por Amour
· Jennifer Lawrence por El lado bueno de las cosas
· Naomi Watts por Lo imposible
Jessica Chastain y Jennifer Lawrence son las favoritas para llevarse el Oscar a la mejor actriz interpretando personajes totalmente opuestos, mientras que Chastain hace uso de la contención en su papel como agente de la CIA a la caza de Bin Laden, Lawrence pone en marcha una montaña rusa de emociones para dar vida a Tiffany en El lado bueno de las cosas. Naomi Watts aspira a la candidatura gracias a la película de Juan Antonio Bayona y aunque ella -y el agua, claro- es la película, si no fue capaz de desbancar a Blancanieves en los Goya difícilmente tiene posibilidades en los Oscar aunque juegue en casa. Quvezhané Wallis y Emmanuelle Riva comparten la anécdota de ser la nominada más joven de la historia y la más mayor, también que han conseguido sendas nominaciones gracias a dos películas inesperadas en esta edición.
Emmanuelle Riva
Sorprende su nominación pero a Emmanuelle Riva le avala una película y una interpretación que la hace merecedora de un reconomiento, otro más. Es verdad que los Premios del Cine Europeo fueron más justos al otorgar el premio también a Jean-Louis Trintignant, su compañero de reparto, porque ambos personajes se retroalimentan y crecen a la par en Amour. Mientras que Trintignant hace un viaje emocional y psicológico, el de Riva es físico y no menos emotivo. Debería haber una categoría que reconociera el trabajo de los dos, como no la hay que al menos el premio a Riva sea extensible y reconozca a los dos.
Jennifer Lawrence
Seguramente el repertorio de emociones que muestra Jennifer Lawrence en El lado bueno de las cosas sea suficiente para que la Academia le confíe el premio a mejor actriz. Ya fue nominada hace tres años por Winter’s Bone encarnando un personaje con una carga dramática muy superior y aunque ahora sea favorita por una comedia eso no desmerece la importancia de su papel en la película. Y es que Tiffany revoluciona la vida de Pat (Bradley Cooper) a la vez que hace lo propio con la historia, la atenta y acertada dirección de actores de David O. Russell puede explicar el primer Oscar en la carrera de una actriz prometedora.
· Bradley Cooper por El lado bueno de las cosas
· Joaquin Phoenix por The Master
· Daniel Day-Lewis por Lincoln
· Denzel Washington por El vuelo
· Hugh Jackman por Los miserables
En una edición normal de los Oscar, Bradley Cooper podría sorprender gracias a su simpática encarnación de un hombre con transtorno bipolar, Denzel Washington optaría a su tercer Oscar por El vuelo, incluso Hugh Jackman podría ganar la estatuilla por un musical… pero en esta edición, la 85º de los premios de la Academia, se han cruzado en su carrera Joaquin Phoenix y Daniel Day-Lewis posiblemente los dos mejores actores del mundo.
Joaquin Phoenix
A lo largo de su carrera Phoenix ha dejado personajes magistrales en películas como The Village, Walk the line o Two Lovers. Aunque su personaje más reconocido fuera en Gladiator lo cierto es que ha crecido de forma imparable y en The Master lejos de crear un personaje se convierte en él tanto física como psicológicamente. Su trabajo quizá no sea reconocido, como tampoco lo ha sido The Master ni su director, pero Freddie Quell es el personaje más enigmático y sorprendente del año.
Daniel Day-Lewis
El irlandés está a un paso de unirse a Walter Brennan y Jack Nicholson en el club de actores con más premios Oscar con tres. Desde hace años selecciona muy bien sus papeles y a Spielberg le costo esfuerzo y años convencerlo para que encarnara a Lincoln, tanto que subordinó el proyecto a la participación del actor. El resultado no puede ser más satisfactorio, Day-Lewis es Lincoln, no lo interpreta, es él y muestra el lado más humano del presidente al que iguala hasta en el acento.
· Michael Haneke por Amour
· Benh Zeitlin por Bestias del sur salvaje
· Ang Lee por La vida de Pi
· Steven Spielberg por Lincoln
· David O. Russell por El lado bueno de las cosas
Tal y como ha transcurrido la alargadísima época de premios, este Oscar tendría nombres y apellidos, pero la ausencia de Ben Affleck en la categoría deja como gran favorito a Steven Spielberg. La inclusión de Benh Zeitlin parece más el guiño a un nuevo talento que un auténtico rival, mientras que a Ang Lee solo le queda aliarse con todos sus dioses. Eso sí, en el caso de que gane Haneke, esperemos que no haga un Roberto Benigni al celebrarlo. Quien sabe, una mala pisada y podría acabar como Bayona en los Goya o protagonizando la segunda parte de Amour.
David O. Russell
Si Woody Allen no lo ganó con Manhattan (fue para Robert Benton por Kramer contra Kramer, glups) tampoco vamos a esperar que David O. Russell sea reconocido por El lado bueno de las cosas. La comedia no suele convencer a unos académicos que obviaran sea precisamente su dirección lo que hace vibrar el guión, fantástico por otra parte. Otorga credibilidad a los diálogos y personajes gracias al uso de la música y su intensa puesta en escena cámara en mano. Los hace salir del estereotipo, les contagia una emoción y calidez que pocas películas tienen este año.
Steven Spielberg
Parece que los planetas se han alineado para que Spielberg recoja este año el Oscar a mejor director. Quizá sea la ausencia entre los nominados de Affleck, de Tarantino, que es el Rey Midas de Hollywood, que ha trabajado muchos años en su película o simplemente que ha dirigido excepcionalmente su Lincoln. Ha sabido contener la película en la penumbra, entre despachos y no ha desaprovechado el enorme talento de Day-Lewis. Mucho se tiene que torcer la noche para la Academia no reconozca su privilegiada dirección por tercera vez en su carrera.
· Amor (Michael Haneke)
· Argo (Ben Affleck)
· Bestias del sur salvaje (Benh Zeitlin)
· Django desencadenado (Quentin Tarantino)
· Los miserables (Tom Hooper)
· La vida de Pi (Ang Lee)
· Lincoln (Steven Spielberg)
· El lado bueno de las cosas (David O. Russell)
· La noche más oscura (Zero Dark Thirty) (Kathryn Bigelow)
Nueve películas compiten en esta edición por el Oscar a mejor película, es difícil que una categoría con tantas nominadas se eche en falta alguna cinta, pero las ausencias de Moonrise Kingdom y The Master son especialmente dolorosas. Tras lo visto en las muchas antesalas que tienen los Oscar, parece que Argo es la favorita aunque la ausencia de Affleck como director puede apuntar a que Lincoln tiene opciones, aunque los premios de la Academia de Hollywood a veces traen sorpresas por si acaso ahí esperan La noche más oscura, Django Desencadenado o Amour.
Django Desencadenado
Cuando Quentin Tarantino cumpla su promesa/amenaza de dar carpetazo a su carrera mas pronto que tarde será momento de repasar su filmografía y nos llevaremos las manos a la cabeza cuando veamos que la mayoría de sus películas han sido ninguneadas por la Academia. Django Desencadenado podría cambiar la suerte del director y por fin obtener el premio a mejor película, aunque somos escépticos ante esta posibilidad, lo cierto es que la incursión en el western de Tarantino ha tenido como resultado una de las mejores películas del año y, creemos, la mejor entre las nominadas. El debate sobre el uso de la violencia, el trato de la esclavitud y demás polémicas que rodean su Django no son muy del agrado de la Academia, lo que le aleja de la estatuilla, pero quien sabe, mientras quede una bala en la recámara hay esperanza.
Argo
Ben Affleck demuestra que es mejor director que actor en su recreación de la famosa operación de la CIA para el rescate de un grupo de americanos en Irán en 1979. Aunque envuelve su película en una épica disney, salpicada por ciertos clichés del cine de acción, lo cierto es que sabe imponerle ritmo y autoridad a su relato. Es sorprendente que no haya sido nominado a mejor director, pero esta circunstancia no tiene porque restar posibilidades a su candidatura como mejor película. Es una cinta muy del gusto de la Academia que siempre ha tratado bien las películas sobre sus héroes, les encantan las hazañas americanas y un lavado de cara a la CIA nunca viene mal, sobre todo estando en las nominadas la obra de Bigelow que pone en entredicho algunas posiciones del gobierno americano en el exterior.