Como cada año, el Festival de Cine Europeo de Sevilla inicia su recorrido con una programación tan heterogénea como irregular. Vuelven las carreras, los pases de prensa con retraso y el desfile de directores como Bertrand Bonello o Nadav Lapid, que presenta dentro de la Sección Oficial The Kindergarten Teacher y a quien Revista Magnolia tuvo oportunidad de entrevistar. Otra cosa son las actividades paralelas; fiestas de pachanga y música electrónica que nos hacen olvidar el espíritu crítico y ese estiramiento tan típico de la cinefagia. La organización del Festival sigue proponiendo, además, fiestas en el fin del mundo; entre antiguos casinos y casas palacio del centro histórico. Pero hablemos de lo que de verdad importa. A fin de cuentas, ésta, es una revista de cine seria.

Blind (Eskil Vogt) – Sección Oficial
Diez películas compiten este año dentro de la Sección EFA por el premio del público; entre ellas, Blind, dirigida por el noruego Eskil Vogt; ganadora del Premio Label Europa Cinemas en la Berlinale y del premio a Mejor Guión en Sundance. Blind narra la vida de Ingrid, aquejada de ceguera y con una innata capacidad para imaginar historias. Nada hay más catártico que la imaginación, y a Ingrid, fantasías no le faltan. Vogt dota a su protagonista de un talento natural para la construcción de personajes y narraciones, egos imaginarios cuyas peripecias se confunden con la rutinaria y claustrofóbica realidad de Ingrid. El film oscila entre la comicidad y la tristeza, reflexionando sobre un tiempo habituado a gestar soledades. Los personajes que surgen de la mente de la protagonista, tipos solitarios e inadaptados que sobreviven, en medio de la deriva, en una Europa hipertecnologizada, son Ingrid misma. Vogt propone un juego de espejos donde la ficción y la realidad se confunden dando como resultado un film irregular pero meritorio. Blind arroja algunas verdades sobre el presente que agradecemos, como egos de carne y hueso, los que nos encontramos al otro lado de la pantalla.

Swim Little Fish Swim (Ruben Amar y Lola Bessis) – SEFF Joven
Todo lo contrario ocurre con Swim Little Fish Swim, coproducción entre EE.UU y Francia sobre una artista pija de París que, huyendo de la sombra materna, se instala en el vibrante Lower East Side neoyorquino para enamorarse de un músico bohemio, casado y padre una niña llamada Rainbow. La cinta, dirigida por Ruben Amar y Lola Bessis, hará las delicias, suponemos, de cualquier seguidor de Russian Red; a nosotros, los desamores lacónicos, la pintura de labios roja y la moda vintage, nos parece cargante y carente de interés. Eso sí, las canciones que salpican el largometraje, podrían escucharse con agradable expresión, dentro de cualquier disco de Love of Lesbian; no obstante, el cine debe ser algo más que un puñado de bonitas canciones.

Turist – Fuerza Mayor (Ruben Östlund) – Sección Oficial
Grata sorpresa la que nos ha deportado Turist, comedia negra sobre las relaciones de pareja, la familia y todos esos pequeños y grandes asuntos que atañen a la miserable condición humana. Premio del Jurado de Un Certain Regard en el pasado Festival de Cannes, el cineasta sueco Ruben Östlund no deja títere con cabeza y sumerge al espectador en un drama tan íntimo como perturbador. De aludes va la cosa. Una pareja y sus dos hijos pasan las vacaciones en un hotel de alta montaña cuando una avalancha se les viene encima. El padre huye. La madre protege a los niños. La tragedia más que física es moral; sobre todo, cuando ninguno de los miembros resulta herido. Östlund disecciona el deterioro de un matrimonio que, como el alud que da pie a la premisa, se va desmoronando ladera abajo. Las situaciones a partir de entonces resultan tan dramáticas como ridículamente divertidas. El principal mérito de Östlund, allende la puesta escena y las magníficas estampas de las cordilleras nevadas, radica en la constante sensación de amenaza que aboca a una familia acomodada hacia la redención heroica; entiéndase esta salvación en tono de corrosivo cinismo inteligente. Östlund lo es (inteligente) y su película, además de uno de los platos fuertes de este festival, es, para quien suscribe, una de las películas del año.

Amour Fou (Jessica Hasner) – Sección Oficial
Otra historia es el Amour Fou, de la directora austríaca Jessica Hausner, presentada dentro de la Sección Oficial y centrada en los últimos días, trágicos y ridículos, del excelso dramaturgo alemán Heinrich von Kleist. Drama de época solvente, más bien desapasionado, el film invita en más de una ocasión a la desesperación, Hausner no consigue despegar y convierte una historia, de por sí maldita y arrebatada, en un cuadro de estampas tan reiterativas como anodinas. No sabemos qué aspecto debe tener el espíritu endemoniado; el suicida desesperado, la inquietud; en Amour Fou no encontramos ni un ápice de esta dictadura del mal. Todo es pretendidamente excéntrico y bonito y a la vez, todo está narrado sin demasiada gracia. Probablemente, la gran película sobre Kleist, está todavía por llegar.