Crítica de La mirada del silencio (The Look of Silence, 2014), en la que Joshua Oppenheimer continúa lo abordado en el celebrado documental The Act of Killing (2012), pero en esta ocasión desde el punto de vista de la familia de una de las víctimas del genocidio que en 1965 se produjo en Indonesia
Nos adentramos en The Act of Killing recorriendo su historia y los posos en la memoria que deja, analizando el artefacto cinematográfico que nos presentan y ahondando en la figura de Anwar Kongo para descubrir que debates éticos y morales ofrece la película. De esta manera, nos acercamos al film danés de Joshua Oppenheimer a través de tres perspectivas, tres piezas separadas que nos ayudarán a reconstruir un mejor mapa crítico.
En The Act of Killing conviven diversos géneros –cine negro, bélico o musical- y una fascinación por el séptimo arte de la que el propio director se siente partícipe, transmitiendo una sensación de incomodidad y llevando a plantearnos los motivos de nuestro asombro y terror por sus imágenes, incluso por las que son mera representación
Comentaba en una entrevista Joshua Oppenheimer, director de la película, que al cambiar el enfoque de la misma –el plan original era contarla a través de los ojos de los supervivientes– se vio obligado a tratar directamente, y darles voz, a los perpetradores de los atroces crímenes que se recrean para la pantalla